Una ubicación buena no muy lejos del lado del lago, de la zona turística y de montañas. Habitación enorme y tranquila con una cama doble, vista increíble, baño.

Una vez en el Alemannenhof, te sentirás como en casa. Disfruté mucho de la tranquilidad de la zona y de la belleza natural que lo rodea. Además, tener un restaurante en el hotel fue conveniente y la comida era deliciosa. Definitivamente, uno de los mejores lugares de la Selva Negra para relajarse y disfrutar de unas vacaciones.

Estacionamiento escaso.

Ha sido una agradable experiencia ,ademas de su excelente servicio, la tranquilidad, la vista del lago, el disfrutar de la naturaleza , todo se confunde en un solo sentido de paz y tranquilidad que se busca para sentir paz interior.

La estancia en el Alemannenhof - Boutique Hotel fue realmente agradable. Disfrutamos de unas vistas impresionantes del lago Titisee desde nuestro balcón. El apartamento estaba bien equipado y espacioso, y el desayuno era abundante y delicioso. A pesar de la conexión a Internet limitada, volveríamos a alojarnos aquí sin duda alguna.

Hotel muy agradable y personal excelente. Un sitio encantador.

Poca variedad del menu y un poco caro

Una ubicación maravillosa y estupenda justo al lado del lago con unas vistas preciosas. La cama era super cómoda, el baño grande y había una cocina y ventanas grandes en la habitación. La habitación era muy espaciosa y elegante, nos gustaría volver.

¡Increíbles vistas al lago desde el balcón y la habitación de lujo! La ubicación es excelente, a solo 10 minutos a pie del pueblo. El desayuno es súper completo y poder desayunar frente al lago con una copa de champán de la zona es una gozada. El entorno es de otro mundo, con un paisaje estupendo y un silencio total junto al lago Titisee. Además, el personal es muy amable, especialmente el chico español de recepción que nos ayudó en todo momento, ¡incluso nos acompañó al restaurante para traducirnos la carta! Gracias por todo. Sin duda, las vistas del hotel al lago y el trato amable del personal son extraordinarios. El desayuno es excelente.

Que este la habitacion en una chalet de madera anexo al hotel y con vistas al lago, el trato del personal y familiar. La vuelta en barco por el lago

Hay unas tarjetas del hotel para actividades gratuitas y no nos las entregaron, con lo que no supimos cuales eran.

Ubicación: el hotel estaba muy cerca de varios restaurantes, del lago y del centro de la ciudad. Además, estaba en la ladera.

La única cosa decepcionante ha sido el baño, era demasiado pequeño.

Ubicación privilegiada con vistas de ensueño al lago Titisee desde la habitación y el balcón. Personal atento, habitaciones nuevas y bonitas, restaurante acogedor con buena comida y desayuno delicioso. Limpieza impecable y apartamentos bien cuidados. Increíbles instalaciones como piscina cubierta, spa y sala de ocio. Dispone de muchos servicios como aparcamiento, consigna de equipaje, bar, restaurante y servicio de transporte gratuito. Además, ofrece acceso directo a la playa privada, zona de juegos y menú infantil. Admite mascotas y tiene zonas para practicar deportes acuáticos, senderismo, ciclismo, golf y esquí. El lugar perfecto para una estancia inolvidable.

Nuestras vacaciones en Titisee fueron alucinantes, tío! Estuvimos súper activos haciendo deportes de invierno, como esquiando y haciendo snowboard. El hotel está cerca de las pistas de esquí, así que fue lo más cómodo del mundo. Además, el desayuno estaba brutal, con un montón de comida rica para cargar energía.

Lo único que nos faltó fue un poco más de fiesta en el hotel. Nos hubiera encantado tener un espacio de música y baile, para pasarlo en grande por las noches.

Entorno con mucha vegetacion al lado de un lago precioso, mucha tranquilidad y buen trato de los empleado.

Una puerta que hay al lado del ascensor, que no se para que esta alli, que al cerrarse lo hace de golpe y hace mucho ruido,

La habitación es muy espaciosa y elegante y tiene unas vistas preciosas. Hay un montón de alimentos en el desayuno, como té, salchichas, queso y también huevos revueltos.

Una estancia inolvidable

Uno de los puntos destacados de mi estancia en este hotel en Titisee-Neustadt fue la ubicación. Desde el hotel, pude explorar el bosque de Brugger, que era simplemente impresionante. Sentí que me sumergí en el bosque de una manera única, conectándome con la naturaleza de una manera intensa, como si estuviera tocando el alma del bosque.

Dado que la carretera directa desde Titisee al hotel estaba cortada, tuve que rodear todo el lago para llegar al hotel. Esto significó recorrer varios kilómetros extra.

Un hotel único con un personal receptivo y un desayuno delicioso. La habitación es de buen tamaño y tiene todo lo que se necesita, incluyendo un minibar, una caja fuerte y un radio. La vista al lago desde la ventana es encantadora. La ubicación es pintoresca, a 2 km está las Badeparadies Schwarzwald. Hay unos restaurantes fantásticos al lado...